Una vez empleada la pintura sobre superficie, su cocción en el horno de casa a 150º hace su pintura permanente y resistente al lavado.
Porcelaine 150 se aplica sobre porcelana y loza, así como sobre la mayoría de los soportes que puedan aguantar una temperatura de 150°C. La elección del soporte y de los instrumentos empleados permitirá jugar con los efectos: la transparencia y la intensidad de los colores. Porcelaine 150 pone el esmalte profesional al alcance de todos con una generación de colores que se fijan horneando el objeto decorado a 150°C, es decir, en cualquier horno doméstico. Ya sea en frasco, tubo o rotulador, su color es profundo y brillante. Pueden mezclarse entre sí, son translúcidas u opacas y tienen un magnífico aspecto esmaltado después de la cocción. Múltiples aplicaciones son posibles con Porcelaine 150: pincel, esponja, plantillas…